La Luz de la Paz de Belén llegó a la Diócesis de Pamplona y Tudela de la mano de Scouts de Navarra– Movimiento Scout Católico.
Cada año, un poco antes de la Navidad, el Movimiento Scout Católico organiza un acto sencillo, pero a la vez, entrañable: la recepción de la Luz de la Paz de Belén en Navarra.
¿Qué es lo que representa este pequeño signo? En Navidad, la simbología de la luz es algo que está presente tanto en los adornos de las calles, como en la propia liturgia de la Iglesia. Ello nos recuerda que Jesús, como afirma el prólogo de San Juan, es la Luz que brilla en la tiniebla y que quiere alumbrar a todo ser humano.
De este modo, si Jesús es la Luz que nos trae la salvación y la paz al nacer en aquel humilde pesebre de Belén, el Movimiento Scout Católico quiere visibilizar este hecho por medio de una pequeña llama que, de año en año, se enciende en la gruta de la basílica de la Natividad, en Tierra Santa. Después, los representantes scouts de numerosas nacionalidades prenden sus velas de la que procede de Belén para llevarlas a sus respectivos países.
Una representación de la Delegación Diocesana de Escultismo (Scouts de Navarra – MSC), acudió a Santander el pasado 11 de diciembre para traer dicha luz a nuestra diócesis y poder distribuirla luego por parroquias, hogares particulares, hospitales, residencias de ancianos, prisiones, etc.
Este año, el lema de la celebración ha sido “Érase la Luz”. Cristo, la Verdadera Luz, ha brillado desde siempre: “Él estaba en el principio junto a Dios.” (Jn 1, 2) Ha iluminado el nacimiento del universo, cada paso de la creación, cada momento de la historia… Y en esta Navidad, vuelve a nacer “en el Belén de nuestro corazón” para seguir alumbrando nuestras vidas. “El Verbo era la luz verdadera, que alumbra a todo hombre, viniendo al mundo.” (Jn 1, 9) Esta Luz inagotable espera nuestra acogida, para que por medio de Ella podamos ser “luz del mundo” (Mt, 5,14), luz de esperanza.
Y también bajo este lema se desarrolló la celebración de acogida en nuestra Diócesis de Pamplona y Tudela, que tuvo lugar el viernes 16 de diciembre, a las siete de la tarde, en la Capilla Mayor del Seminario Conciliar San Miguel de Pamplona. La celebración fue presidida por nuestro Arzobispo, Mons. Francisco Pérez. Además, se contó con la participación de distintos grupos, movimientos y parroquias. Todos unidos para recoger esa luz que es signo de amor y de esperanza.
Pero la misión de la Luz de la Paz no culminó con esa celebración. A lo largo de los siguientes días, tocó llevar la luz a otros muchos lugares y realidades: parroquias, hogares, hospitales, residencias, colegios, etc. Por eso, desde Scouts de Navarra–Movimiento Scout Católico, desean que esta pequeña llama procedente de Belén, con la que encendieron aquella tarde sus propias velas, ilumine, sobre todo, los corazones de cada uno de los creyentes y nos mueva a todos a crecer en nuestra fidelidad al Evangelio.
