Nuevos mártires beatos navarros en el Año de la Fe (XI)
Hermanos Maristas (II)
Tres navarros formaban parte de la comunidad de dieciséis Hermanos Maristas de Toledo. Todos fueron fusilados el 23 y 24 de agosto de 1936 en dicha ciuidad, frente a las escalerillas del Tránsito.
LORENZO LIZÁSOAIN LIZASO (H. Jorge Luis)
Nació en Irañeta (valle de Araquil) el 4 de septiembre de 1886, hijo de Miguel Ángel y Francisca. Fue bautizado al día siguiente con el nombre de Lorenzo. El 26 de agosto de 1901 ingresa en el noviciado de San Andrés del Palomar (Barcelona), viste el hábito el 30 de marzo de 1902 con el nombre de Jorge Luis; su primera profesión fue el 6 de septiembre de 1903 y su profesión perpetua el 28 de agosto de 1908. Guipúzcoa, Cataluña, Córdoba (sólo un año) y Toledo son sus destinos.
De complexión más que atlética, hercúlea, impresionaba al primer golpe de vista, pero quien lo trataba pronto descubría en él un gran corazón, en el que cabían todos, desde el cardenal o el gobernador civil, hasta las familias obreras. Era un gran devoto de la Eucaristía. En clase había montado un sistema de control y disciplina, formado por los mismos alumnos, que daba excelentes resultados.
Fue asesinado el 24 de agosto de 1936 en Toledo, a los 49 años, 32 de religioso.
JULIO MÚZQUIZ ERDOZÁIN (H. Julio Fermín)
Nació en Aldaba, hijo de Esteban y Ramona, el 12 de abril de 1899. Fue bautizado el mismo día con el nombre de Julio. Su familia era numerosa y acomodada y, sobre todo, laboriosa y de una profunda vida cristiana.
A los 15 años ingresa en el juniorado. Viste el hábito el 25 de julio de 1914, emite los votos temporales el 25 de julio de 1915 y los perpetuos el 28 de septiembre de 1920. Su vida en comunidad queda bien reflejada en esta frase: “Contribuía con su amenidad, con su carácter y con su capacidad de comunicación a hacer reinar el bienestar y la caridad en la vida comunitaria”.
Sus destinos fueron Zaragoza (1917), Barcelona (1919), Cartagena (agosto de 1919), Burgos (1925), Zaragoza (1927) y Toledo (desde agosto de 1933). Es asesinado el 23 de agosto en Toledo, a los 37 años, 21 de religioso.
ÁNGEL AYAPE REMÓN (H. Bruno José)
Nació en Cáseda, hijo de Javier e Isabel, el 1 de octubre de 1915. Al día siguiente fue bautizado con el nombre de Ángel. El 18 de marzo de 1927, habiendo ya muerto su padre, ingresa en el juniorado marista de Villafranca (Navarra). Viste el hábito el 8 de septiembre de 1931, emite los primeros votos el 8 de septiembre de 1932 y sus únicos destinos son Madrid (1933) y Toledo (1935). El 23 de agosto, cuando sólo tenía 20 años, es asesinado en Toledo.
Era íntegro en sus convicciones; las defendía con calor, pero sin zaherir al contrincante, de buen carácter, simpático, vivaz y atrayente. Su hermana María recuerda la visita que le hicieron con su madre, cuando se hallaba en Madrid, en la calle de Los Madrazo. Ante la preocupación por la animadversión declarada por la República a la religión, le dijo: “¡Qué felicidad sería para mí el morir mártir!”.
A su funeral en Cáseda asistió todo el pueblo y sirvió mucho para apaciguar los ánimos de todos, bastante divididos por la guerra. El párroco hizo una homilía exhortando a la reconciliación y al perdón de los enemigos.
Santiago Cañardo Ramírez