Visita pastoral a los navarros de México
Del día 25 al 31 de febrero, Mons. Francisco Pérez realizó una visita pastoral a los navarros en México. El motivo de su visita fue la entronización de la Virgen de Roncesvalles de México. José Antonio Campos, parroco de Castejón, acompañó al Sr. Arzobispo a Mejico y ha escrito esta crónica del viaje, que tuvo lugar desde el 25 al 31 de enero.
Día 25 de enero:
Después de una largas doce horas y media de viaje, llegamos al Distrito Federal de México a las seis de la tarde hora del lugar. A nuestra llegada nos recibieron en el aeropuerto quienes son nuestros anfitriones en este viaje, Don Joaquín Azcona religioso del Verbo Divino, y natural de Arróniz y la señora Pilar Arzalus, promotora junto a otros navarros de México, de la entronización de una imagen de Nuestra Señora de Roncesvalles en un templo de la capital mexicana.
Don Francisco (el Sr. Arzobispo) y José Antonio Campos (párroco de Castejón), fuimos recibidos en la casa provincial de los religiosos del Verbo Divino en México, y que será nuestra casa en este visita. Toda la comunidad nos acogió con grande agrado y simpatía.
Día 26 de enero
Primer día de la visita, un día dedicado a visitar lugares emblemáticos. A las nueve de la mañana, celebramos la Eucaristía en la parroquia «La Ascensión del Señor», a la cual pertenece la casa provincial donde nos hospedamos. Don Francisco compartió saludos afectuosos con el grupo de fieles asistentes a la misa. Después del desayuno, la buena anfitriona Señora Pilar Arcelus, nos llevó a visitar el museo del Virreinato, en el municipio de Tepotzotlan. Fue una visita turística con sus agradables sorpresas, unas en forma de descubrimientos artísticos sorprendentes, y otras en forma de encuentros humanos, Don Francisco recibió el cariño y la atención de las personas responsables del museo como de un numeroso grupo de jóvenes religiosas que a su vez visitaban el lugar. El museo es prácticamente la iglesia de San Javier y el convento adosado al templo con sus capillas y dependencias; una joya del arte churrigeresco. Después de la visita cultural, comimos en un restaurante de la plaza donde está el museo, regentado por una familia de navarros. Por la tarde, ya de regreso a la ciudad, visitamos la parroquia de Zcestochowa, de los padres Agustinos Recoletos. El padre José Luis Goñi de Puente la Reina, y el padre Gerardo Ruiz de Arnedo, enseñaron la parroquia y sus salones a Don Francisco.
DIA 27 DE ENERO
Jornada en la ciudad de Puebla de los Ángeles. Después de celebrar nuevamente la Eucaristía en la parroquia de la Ascensión del Señor, el padre Joaquín Azcona, nos llevó en coche hasta la ciudad de Puebla. Lugar ya visitado antes por don Francisco, y de muy gratos recuerdos para él.
Fuimos cuatro personas, Don Francisco, Don Joaquín Azcona, la señora Pilar Arcelus y José Antonio Campos. Fue una entrañable jornada para todos. Don Francisco se reencontró con su amigo y compañero en el episcopado, Don Rosendo Huesca, arzobispo emérito de la archidiócesis de Puebla. Si la acogida de Don Rosendo fue entrañable, igualmente lo fue del actual arzobispo Don Victor Sánchez, quien nos agasajó con una buena comida en su casa.
Don Rosendo y Don Francisco, recordaron juntos muy especialmente sus trabajos en la causa de beatificación del Virrey Palafox. Este personaje les unió a los dos arzobispos en su amistad personal, y está uniendo a la ciudad de Puebla en México y a Fitero en Navarra.
El perfecto colofón a la jornada en Puebla, fue la visita a la catedral. La archidiócesis se encuentra en año jubilar, con motivo de la próxima beatificación del Venerable Juan de Palafox y Mendoza. Los tres arzobispos entraron juntos en la catedral por la puerta del perdón, donde se encuentra la tumba vacía de Palafox, rezaron juntos, al igual que hicieron ante el sagrario. La visita a la catedral estuvo seguida por los periodistas y reporteros de los distintos medios de comunicación de la ciudad de puebla, invitados por su arzobispo el evento. Es notable la presencia palafoxiana en la devoción de estas gentes y en la historia de la ciudad de Puebla de los Ángeles. Después de una entrañable despedida de don Rosendo nos regresamos a México DF.
28 de Enero:
En la mañana después de la oración y el desayuno con la comunidad de los misioneros del Verbo Divino, que están siendo unos perfectos anfitriones, Don Francisco y el padre José Antonio fueron a visitar la Virgen de Guadalupe en su Basílica del cerro de Tepeyat. La llegada a la Basílica fue un tanto accidentada, Nuestra Madre de Guadalupe se las ingenió para que Don francisco caminara unos dos kilómetros hasta su casa y llegara como un peregrino más, junto a una peregrinación fieles de Cihuahua. (hubo una manifestación que impedía llegar en coche hasta la Villa)
El retraso en el horario previsto no hizo posible celebrar la eucaristía en el altar mayor, así que la celebramos en una de las capillas laterales dando vista a la imagen de Nuestra Señora; en la eucaristía estuvieron presentes dos navarras de Tudela y Oronoz Mugaire. Después de la misa, Don Juan Aranguren, natural de Bilbao, y canónigo de la Basílica, obsequió a Don Francisco una imagen de la Virgen, que es entregada a las personas ilustres que vienen a ponerse a los pies de Nuestra Señora.
Antes de la comida, las señoras navarras que celebraron la eucaristía con Don Francisco tuvieron el detalle de acercarnos hasta el centro histórico de la ciudad y visitar la iglesia llamada de la enseñanza , joya del arte religioso colonial, y que fue fundación de las religiosas Hijas de María , venidas desde nuestra Tudela navarra. La comida fue en la casa de los padres Agustinos Recoletos de la que aquí llaman zona de los hospitales,( veinticinco mil pacientes y acompañantes de estos pasan diariamente por esta zona de la ciudad). Después de la comida fraterna, el padre Javier Acero nos mostró las instalaciones de la obra social que los padres recoletos tienen en este lugar. Especial fue la visita al Centro Cardi, el año 2010 se ayudó a treinta y un mil personas. (asesoría, ayuda en medicinas ,cursos diferentes de ayuda a la persona, baños y duchas, lavadoras,…)
En la tarde y de nuevo en la casa provincial de los misioneros del Verbo Divino, tuvo el encuentro fraterno de los misioneros navarros capuchinos, padre Fco. Javier Sádaba y padre Andueza, y el padre dominico Javier Zugasti, además del anfitrión Joaquín Azacona.
Día 29 de enero, sábado.
Comenzó el día con una visita fraterna de Don Francisco a Don Norberto Rivera, cardenal y arzobispo de México DF, fue un encuentro donde la conversación entre prelados les sirvió para conocerse mutuamente y conocer un poco de las realidades de sus respectivas diócesis.
Después de la visita al Cardenal Norberto, la navarrica Lourdes Mendiburu y el padre Joaquín Azcona nos acercaron a conocer el centro ASOMAS, creado por una navarra. Es un centro que atiende a niños y jóvenes con discapacidades severas, ceguera, sordera, parálisis cerebral, La visita de don Francisco fue una cosa muy especial, tanto para los niños que en ese momento se encontraban allí , como para las tabajadoras y responsables de que esta buena obra siga adelante.
El sábado continuó con una comida de cumpleaños en la casa del vicario de los Agustinos Recoletos en México; don Francisco fue invitado a comer con los religiosos en el cumpleaños del padre Carlos González (el vicario). La comida fue también un encuentro con el padre Carlos Briseño, obispo agustino, y los padres navarros, Antonio Rada (de Berbinzana), Gabriel (de Beriáin), Francisco Javier Goizueta (de Pamplona) y el padre Javier Mauleón (de Mues). A las seis y media de la tarde Don francisco presidió en la parroquia de la Virgen Zcestochowa la celebración eucarística.
Día 30 de enero, domingo.
Llegó el día señalado para la entronización de Nuestra Señora de Roncesvalles (en la foto), jornada clave en la visita pastoral de Don Francisco a México y su encuentro con navarros que aquí viven. La Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, donde fue la entronización se quedó pequeña para cobijar a los parroquianos de la misma y al nutrido grupo de navarros que se dio cita para la Eucaristía. Fue una celebración emotiva y la Virgen de Roncesvalles-Orreaga se encargó de que todos los que participamos de la celebración estuviéramos cerca de Navarra, aun en la distancia. Las palabras de Don Francisco en la homilía cautivaron a los fieles haciendo hincapié en el camino-camino de fe-camino de luz que desde la casa de la reina de los Pirineos nos lleva hasta Compostela.
Además de la Bendición de la imagen entronizada, unas cincuenta personas se acercaron con sus diferentes imágenes de Nuestra Señora de Roncesvalles para la bendición. La celebración concluyó con unas animosas palabras del padre Joaquín Azcona, que recordó y agradeció a todas las personas que hicieron posible este viaje y este encuentro, mención especial al ya ausente Padre Julián.
José Antonio Campos (párroco de Castejón)