Procesión histórica de San Fermín
Miles de personas arroparon a la imagen de San Fermín en el transcurso de una histórica procesión, que tuvo lugar el pasado domingo 8 de abril desde la parroquia de San Lorenzo a la Catedral de Santa María la Real de Pamplona, donde permaneció dos días.
El pasado 8 de abril, segundo domingo de Pascua, la imagen de San Fermín realizó una procesión histórica, con el lema “La Catedral le espera y San Fermín la bendice”, al celebrarse este 2018 el Año Santo Jubilar de San Fermín. A las seis de la tarde, una banda de música saludó con el Himno de Navarra la salida del santo desde la capilla de San Fermín a las puertas de la iglesia de San Lorenzo. La imagen del copatrono de Navarra se dirigió a la Catedral de Santa María la Real de Pamplona, recorriendo la calle mayor, la plaza del Ayuntamiento y la calle Curia. Durante su traslado, la imagen de San Fermín fue portada por los mismos portadores que la llevan el día 7 de julio y estuvo acompañada por músicos y gaiteros. En la calle Mayor se cantaron jotas al santo, en el pocico de San Cernin sonó de nuevo el Himno de Navarra, y en la Plaza del Ayuntamiento la Cofradía de San Saturnino entonó la Aurora a San Fermín de Manuel Turrillas.
En el cortejo participaron la cruz parroquial de San Lorenzo, los gaiteros, las cofradías y hermandades de Pamplona, una representación de cofradías y hermandades de Navarra, las cuatro banderas de las cuatro zonas pastorales de la Diócesis de Pamplona y Tudela: roja (Mendialde), blanca (Ribera), azul (Zona Media) y Verde (Pamplona). Junto a todos ellos marcharon las principales advocaciones marianas de Navarra, los sacerdotes, la Corte de San Fermín, los portadores, el cabildo de San Lorenzo y el propio Arzobispo. La imagen de San Fermín iba ataviada con el último capote que se bordó en 1995 y con el báculo y la mitra del día grande.
A su llegada a la Catedral, el santo fue recibido en el atrio por el Cabildo Catedralicio, mientras se escuchaban los repiques de la campana María dándole la bienvenida. Poco después de las 19,00 horas, con el santo plantado frente al presbiterio, comenzó la solemne Eucaristía presidida por el Señor Arzobispo, Mons. Francisco Pérez González, y cantada por Capilla de Música.
Tras permanecer dos días en la Catedral, San Fermín regresó a su capilla tras la Misa de la Dedicación de la Catedral, y lo hizo acompañado por la imagen de San Miguel de Aralar, de bandas de música y txistularis. El pasado martes la imagen de San Fermín volvió a su capilla en San Lorenzo, donde descansará hasta su próxima y tradicional salida el 7 de julio de 2018 para poner fin al Año Jubilar Sanferminero y proceder al cierre de la puerta santa.
La última vez que se había visto a San Fermín por las calles de Pamplona en una fecha diferente a la del 7 julio fue el 9 de mayo de 1922. Entonces, acompañado de San Miguel de Aralar y de Santa María la Real, acudió a recibir la reliquia de San Francisco Javier. El brazo del Santo navarro había llegado desde Roncesvalles a la capital navarra para conmemorar el centenario de la canonización del patrón.
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