LA COMUNIÓN DE LOS SANTOS 02-10-2011
Pregunta: Poco a poco estoy leyendo y profundizando en el Catecismo de la Iglesia Católica. Me encuentro con temas que no había entendido o ignoraba. Cada vez veo más necesario leerlo. ¿Podría explicarme lo que significa la comunión de los santos?
Respuesta: Me alegra que, cada vez más, los cristianos se preparen y se formen bien en lo que concierne a su vida de fe. No podemos dejar que pase el tiempo sin dar razón de la misma. Para ello, como digo, debemos prepararnos bien. El Catecismo nos ayuda a ello. Necesitamos de él para conocer mejor y alimentar lo que creemos. Un católico que no se forma, a la larga perderá la lozanía de su fe.
El sentido, de la fiesta de todos los santos, es muy sencillo: sabemos que formamos, desde el día de nuestro bautismo, una familia de cristianos y que este sacramento nos incorpora a Jesucristo, el único santo. Por el bautismo participamos de su santidad, es decir, de su vida de amor y de gracia santificante.
La santidad no es sólo un valor o una virtud, es mucho más: es vivir unidos al amor de Dios y estar en su gracia. Y todos los que formamos la Iglesia terrestre estamos unidos a la Iglesia celestial donde la santidad es ya definitiva. De ahí que vayamos a los cementerios o apliquemos sufragios en las Misas para recordar a nuestros difuntos y para rezar por ellos, si están en el purgatorio, a fin de que puedan participar de esta santidad total que se vive en plenitud en el cielo.
Al participar con otros de estas gracias, estamos unidos como en un cuerpo teniendo un fondo común del que todos somos usufructuarios. Al estilo de los vasos comunicantes. Cuando hay unión entre todos, lo que recibe uno beneficia al otro. La expresión comunión de los santos tiene “dos significados estrechamente relacionados: comunión en las cosas santas y comunión entre las personas santas” (CIC 948).
“Como todos los creyentes forman un solo cuerpo, el bien de los unos se comunica a los otros… Es, pues, necesario creer que existe una comunión de bienes en la Iglesia. Pero el miembro más importante es Cristo, ya que Él es la cabeza… Así, el bien de Cristo es comunicado a todos los miembros, y esta comunicación se hace por los sacramentos de la Iglesia” (Santo Tomás de Aquino).
Creo que en estos momentos se nos pide, a los cristianos, que vivamos con mayor intensidad la perfección del amor que es la santidad. Si de algo hemos de ser testigos es del amor de Dios que se nos regala en los sacramentos y de modo especial en la Penitencia y en la Eucaristía. De esta forma participamos de la comunión de los santos.