Saludo de Mons. Francisco Pérez, Arzobispo de Pamplona y Obispo de Tudela
El nombramiento de nuestro arzobispo emérito D. Fernando Sebastián Aguilar como Cardenal, es un motivo de gozo para la Diócesis de Pamplona y Tudela. El Papa Francisco ha reconocido de este modo su trayectoria episcopal y la labor realizada a lo largo de su vida en el campo de la teología, de la espiritualidad, de la pastoral episcopal así como su labor en la Iglesia española. Durante años, fue cabeza y pastor de las comunidades cristianas de Navarra, pudiendo experimentar tanto los sacerdotes como los fieles sus valores evangélicos, sus desvelos y sus virtudes humanas. Damos gracias a Dios por este don con el que ha bendecido a nuestros Arzobispo emérito y que enriquece también nuestra Iglesia diocesana. Y pidamos todos para que Dios le ilumine y le dé la sabiduría necesaria para seguir sirviendo a la Iglesia como colaborador y consejero directo del Papa Francisco. El hecho de ser Cardenal no le sitúa en un pedestal especial sino más bien en un servicio cualificado para el bien de la Iglesia como portadora del amor y gracia de Jesucristo. Sus vestimentas serán rojas pues reflejan el modo de vivir que debe ahora asumir: derramamiento de sangre, si es necesario, por defender el evangelio de Cristo. Así se lo dijo el Papa Francisco el mismo día de la investidura. Quiero, en nombre de toda la Diócesis, dar la enhorabuena y felicitamos al Cardenal Sebastián por su respuesta rápida y sin demora ante la petición del Papa Francisco. Bien merecido lo tiene y no por vanidad u orgullo sino por su entrega generosa a Cristo en su Iglesia. Nosotros también estamos gozosos por todo lo que esto supone y por lo que en estos momentos él ofrece. Que Santa María la Real, San Antonio María Claret y todos los santos de su devoción le acompañen en estos momentos. Así lo deseamos toda la Diócesis de Pamplona y Tudela. Mons. Francisco Pérez González Arzobispo de Pamplona y Obispo de Tudela
Mons. Francisco Pérez González
Arzobispo de Pamplona
y Obispo de Tudela
